Sin progresos actividad turística en España

En julio, primer mes completo sin restricciones a la movilidad por la pandemia de la Covid-19, casi tres millones de viajeros utilizaron algún establecimiento extrahotelero (apartamentos, acampadas, casas rurales o albergues).

Las noches realizadas por esos veraneantes superaron los 9,9 millones, lo que supone un descenso del 49,9 por ciento en comparación con los 19,8 millones notificadas en el mismo período del año pasado, señaló el INE.

Pese a no remontar, los datos mejoran frente al desplome del 84,6 por ciento y 1,97 millones de pernoctaciones registradas en junio.

Esta caída interanual, la más baja desde el estallido de la crisis por el coronavirus SARS-CoV-2, es resultado de la disminución tanto de las pernoctaciones realizadas por los españoles (19,4 por ciento) como de las efectuadas por los extranjeros, que se hundieron un 77 por ciento.

Durante los siete primeros meses de 2020 se contabilizaron 26,2 millones de estancias en alojamientos no hoteleros, un 61,7 por ciento menos que en similar lapso del ejercicio precedente.

Estas malas cifras se suman al derrumbe del 73,4 por ciento interanual de las pernoctaciones hoteleras en julio, notificado la semana pasada por el organismo estatal.

Afectado por el confinamiento y el cierre de fronteras, decretado entre mediados de marzo y finales de junio, el turismo español confiaba en salvar la temporada de verano, pero sus expectativas se vinieron abajo por los numerosos rebrotes de la Covid-19.

El incremento exponencial de contagios en este país europeo, que en 2019 fue el segundo destino turístico del mundo, provocó un endurecimiento de las medidas sanitarias y limitaciones de viajes desde terceras naciones.

mem/edu