Desarrollo territorial, economía más eficiente
Por Elizabeth Díaz La Habana, 19 sep (Prensa Latina) La recién aprobada política para el desarrollo territorial en Cuba respalda el fortalecimiento de los municipios al establecer una sólida base económico-productiva, reducir las desproporciones y aprovechar sus potencialidades con autonomía y sustentabilidad.
Igualmente, puede existir una participación procedente del extranjero, cooperación, donativo, pero en ningún caso la dependencia de esos fondos para la sostenibilidad del proyecto, explicó a Cuba Internacional el ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil.
Aunque los proyectos de desarrollo local potenciarán los económicos– productivos, también pueden ser socioculturales, ambientales, institucionales y de investigación, desarrollo e innovación, con especial mirada a la producción de alimentos.
Se abordará de forma prioritaria que tributen a la estrategia de desarrollo municipal y/o provincial, la coexistencia de actores locales para la promoción y generación de exportaciones, sustitución de importaciones, encadenamientos productivos, utilización de los recursos endógenos, y que contribuyan a la seguridad alimentaria.
La estrategia también contempla la generación de empleos, la capacitación, el aprovechamiento de los recursos y de la fuerza de trabajo de cada territorio.
En cuanto a los titulares de proyectos, estos tienen la posibilidad de combinarse para la producción o prestación de servicios, sin necesidad de constituir una nueva persona jurídica.
‘Pueden responder a entidades estatales, cooperativas, trabajadores por cuenta propia, organizaciones de masa, y otras formas de propiedad como las micro y pequeñas empresas, y en determinadas asociaciones e instituciones’, esclareció el titular de Economía.
Los incentivos, dijo, son muy importantes para que las políticas se conduzcan de manera más natural y menos administrativa. Entre ellos citó la distribución de las utilidades, la remuneración a los participantes de los proyectos a partir de las ganancias y el acceso a los mercados mayoristas y minoristas.
El también viceprimer ministro definió que luego de pagar los impuestos, ‘los proyectos podrán disponer del 50 por ciento de las ganancias para el reaprovisionamiento’, y añadió que ‘el otro 50 por ciento se destinará al desarrollo de la localidad; todo se queda en el municipio’.
Aquellos que logren exportar o encadenar sus producciones, por ejemplo, con la Zona Especial de Desarrollo Mariel, también podrán retener un por ciento de la divisa.
Se trata de una estrategia de progreso territorial diseñada con amplitud y dirigida a eliminar las trabas, ampliar los horizontes y con flexibilidad en su funcionamiento, resaltó Gil.
PRINCIPIOS DE LA ESTRATEGIA
Para la aplicación de esta política quedaron establecidos nueve principios
fundamentales como la planificación centralizada, sin que esto signifique la asignación de recursos desde el ‘centro’, sino dirigirse hacia su descongestión administrativa.
La producción nacional como elemento esencial y el destierro de la mentalidad importadora constituyen ejes de la estrategia, dijo el titular, quien aclaró que para ello urge encontrar soluciones a las demandas de la economía en la industria nacional.
Otro elemento es la regulación del mercado, y lograr la complementariedad de los actores económicos: el trabajo por cuenta propia, el sector estatal, el no estatal y las cooperativas.
Entre los principios está el papel dinamizador de la demanda interna para la economía como motor impulsor, sus vínculos con la productividad, inversión, generación de empleos y utilizar esas necesidades en función del crecimiento productivo del país.
Asimismo, se incluye dotar de mayor autonomía de gestión al sector empresarial, y lograr que la agrupación estatal socialista sea eficiente, competitiva y emplee con eficacia los recursos materiales y financieros en pos del ahorro, sin que eso signifique dejar de hacer.
(Tomado de Cuba Internacional)
Prensa Latina