Un grupo de voluntarios resuelve el caso de un adolescente desaparecido hace 55 años en EE.UU.

Publicado: 31 dic 2021 23:03 GMT

La Policía del condado de Miami-Dade logró identificar y situar al sospechoso en la escena del crimen gracias a la información «fundamental» descubierta por la organización Surfside Kidnapping.

Una investigación realizada por voluntarios de la comunidad de Surfside, en Florida (EE.UU.), por cerca de una década desempeñó un papel «fundamental» para cerrar el caso de la misteriosa desaparición de un adolescente hace 55 años, informó este miércoles la Policía del condado de Miami-Dade.

Según detalló John Grossman, detective de homicidios a cargo del caso, la investigación hecha por la organización Surfside Kidnapping «desenterró información crucial» para identificar a George Defeis como el secuestrador y probable asesino de Daniel Goldman, que fue raptado de su hogar en mayo de 1966, poco antes de cumplir 18 años.

De acuerdo al agente, después de maniatar a los padres del menor, el criminal lo sacó por la fuerza de su hogar y exigió un rescate de 25.000 dólares, el equivalente a unos 215.000 en la actualidad. Sin embargo, la llamada para arreglar la liberación del rehén nunca llegó, quedando el caso sin resolver desde entonces.

Resolución del caso

Por su parte, Paul Novack, miembro fundador de la organización y exalcalde de la localidad, señaló que durante las investigaciones que comenzó con su equipo hace cerca de una década identificó a Defeis al revisar los expedientes de otros homicidio y, tras estudiar sus conexiones, pudieron vincularlo con la desaparición de Goldman.

La Policía logró determinar que Defeis estaba detrás del secuestro al ubicarlo en la residencia de los Goldman horas antes de los crímenes, gracias a la descripción del delincuente hecha por los padres del adolescente, quienes enfatizaron su manera distintiva de caminar debido a una discapacidad.

A pesar de que el cuerpo no fue encontrado, Novack asegura que su equipo reunió evidencia suficiente para probar que el chico murió uno o dos días después de su secuestro, y que sus restos fueron arrojados al océano. 

«[Cincuenta y cinco] años después, por fin podemos dar un cierre a la familia de Danny con la identificación de la persona responsable del horrible suceso que provocó su muerte», concluyó el detective Grossman, que lamentó no poder presentar al criminal ante la justicia, ya que murió en la década de 1980.