UMIDIGI Bison Pro rompe los precios de la gama media en México
El UMIDIGI Bison Pro es un teléfono atrevido por dos factores: su precio y las características que ofrece. Para profundizar más en esta idea, hemos podido tener el smartphone en las manos por algunos días, así que también te contamos todo lo que nos gustó y en lo que pudo haber mejorado.
La marca china nació en 2012, pero fue hasta noviembre de 2018 que entró al mercado mexicano y otros territorios latinoamericanos mediante las ventas en línea. Además de celulares, principalmente distribuidos en la gama media, también fabrica relojes inteligentes.
“Desarrollamos conjuntamente productos con los clientes en función de sus comentarios sobre la experiencia de usuario tanto del hardware como del software”, precisa UMIDIGI.
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Mejores características
Lo primero que destaca del móvil es su diseño rugged o sumamente resistente, por lo que no se puede esperar una unidad ligera o compacta. Su estructura está cubierta por un caucho industrial avanzado y una protección mejorada para piezas frágiles, según su descripción. La promesa es que podría salir bien librado de una caída de hasta 1.8 metros (certificación militar MIL-STD-810G).
Asimismo, incluye las clasificaciones IP68 e IP69K; la primera le permite sumergirse hasta 1.5 metros durante 30 minutos (la cámara incluye un modo subacuático), en tanto que la otra lo hace resistente a altas presiones de líquido y agua a una temperatura alta (80 grados centígrados).
En su lateral derecho, en un marco metálico, la firma colocó los botones de volumen, el de encendido y uno personalizable, al cual se le pueden establecer hasta tres acciones.
Del lado contrario, también en un marco metálico, se ubican la ranura que alberga la tarjeta de datos y almacenamiento extra, el sensor de huellas para desbloquear el smartphone (una buena noticia para los zurdos) y otro botón personalizable, al cual se le pueden establecer también hasta tres acciones.
El teléfono no olvida el puerto de carga (USB-C) y el jack de 3.5 mm con la idea de integrar unos audífonos alámbricos.
UMIDIGI echó mano de Sony con el propósito de configurar su óptica principal triple —comandada por un sensor de 48 megapixeles— y frontal de 24 megapixeles para las selfies.
Llama la atención que el módulo de la cámara trasera también incluye, además del flash dual, un sensor infrarrojo que permite medir la temperatura tanto de personas como de objetos con una buena precisión.
No es imposible llevar al Bison Pro como el móvil de “todos los días”, pese a su diseño robusto, sin embargo, es un dispositivo que está más dirigido a quienes realizan labores en exteriores o les gustan las actividades extremas.
¿Qué hay de su rendimiento y multimedia?
Como su diseño, el desempeño del Bison Pro no decepciona. Es cierto, tampoco es que incorpore un procesador de gama alta, sin embargo, los elementos internos trabajan en conjunto de manera adecuada con la intención de que el teléfono responda bien en las tareas que se le soliciten, desde apps de juegos hasta plataformas de productividad.
Bajo su robusta carcasa alberga el procesador Helio G80 —el mismo que se puede encontrar en smartphones como el Galaxy A32 y Vivo Y20G— y una RAM de 8 GB (LPDDR4X). Para almacenar todo tipo de contenidos, como fotos y las aplicaciones preferidas, la compañía incorporó 128 GB de espacio.
Respecto a su batería de 5,000 mAh, las personas pueden estar seguras de que incluso podrían alcanzar un rendimiento de hasta dos días. Lo que sí es que su carga rápida queda a deber, pues es de 18 watts (ello significa que el equipo demanda unos 120 minutos de energía para que la fuente de poder pase al 100 por ciento).
Al momento de querer disfrutar de series y películas, el móvil presenta una pantalla de 6.3 pulgadas con resolución Full HD+ (2,340 x 1,800 pixeles). Es un tamaño que ya está más que probado por los distintos fabricantes.
Los colores en el display son claros, sin llegar a ser vívidos, en tanto que existe un buen nivel de contraste. Si bien no se presenta el “efecto fantasma”, los segmentos de acción no son del todo fluidos, no como los que proporcionan celulares con una tasa de actualización alta (esta no está indicada en la pieza de UMIDIGI).
El canal de audio, uno solo en la parte posterior del equipo —interesante disposición—, es potente, pero puede que se sature cuando los niveles de volumen están al máximo.
Interfaz de usuario
Al contar con Android 11, es posible encontrar en el Bison Pro un celular intuitivo. Sus herramientas adicionales, ubicadas sobre todo en la carpeta Toolbox, no se sienten fuera de lugar ni mucho menos molestas, especialmente por “la naturaleza” del mismo.
Además del termómetro, que utiliza el sensor infrarrojo en el módulo de la cámara principal para funcionar, otras funcionalidades que destacan son el barómetro, brújula, medidor de ruido y podómetro.
Ya en la configuración general del equipo, además de los ajustes tradicionales, es posible establecer desde las plataformas que se ejecutarán cuando se presionen los botones físicos personalizables hasta los contactos de emergencia.
En lo que puede mejorar
El Bison Pro guarda un buen equilibrio entre su costo y las características que ofrece. En lo que tal vez pudo haber sido más discreto es en los botones, ya que de pronto se siente saturado de elementos en sus bordes.
Además, el sensor de huellas, que no está integrado en el botón físico de encendido, es difícil de ubicar (se pierde con el marco) y no responde de manera tan rápida.
Por último, se extraña que no incluya una carga tan robusta como sí lo es su diseño. El usuario hubiera agradecido tener, por lo menos, 30 watts en este teléfono.
Disponibilidad
El UMIDIGI Bison Pro está disponible en Amazon por unos $300 dólares, pero lo interesante es que en México se puede adquirir hasta con un precio de $206 dólares, es decir, unos 4,200 pesos. Entonces, representa una buena oportunidad para quienes buscan un smartphone superresistente por fuera y eficiente por dentro, sin que eso signifique que deje de ser accesible respecto a su costo.
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