Red Dead Redemption 2: un juego educativo, según estudio
¿Acaso los videojuegos convierten a las personas en expertos en alguna materia? No necesariamente, pero de acuerdo con un nuevo estudio, quienes juegan Red Dead Redemption 2 se hacen más conocedores de la vida animal silvestre que el resto de gente.
El estudio fue realizado por investigadores del Penwith College y la Universidad de Exeter, y tenía como uno de sus objetivos analizar el impacto educativo que tienen videojuegos diseñados con fines de entretenimiento.
Para ello se tomó a Red Dead Redemption 2 como banco de pruebas; en aquel título, existe una buena variedad de animales silvestres repartidos por el mapa. Así, los investigadores entrevistaron a 583 participantes, de los cuales solo 444 habían jugado RDR2 antes.
Las preguntas de la encuesta tenían relación con los animales que se ven en el juego. En general, quienes lo jugaron tuvieron un mayor número de acierto en las respuestas respecto a quienes no habían probado el título.
Por otra parte, los animales que tenían una mayor utilidad del juego fueron identificados con mayor exactitud. En cambio, otros que aparecen con menos frecuencia a lo largo de Red Dead 2 fueron más difíciles de reconocer por los consultados, sin importar si habían jugado el juego o no.
Más importante aún es el hecho de que la mayoría de los que jugaron RDR2 aseguraron que las respuestas correctas tenían que ver con lo visto dentro del juego. A raíz de esto, los investigadores creen que los jugadores aprenden más gracias a la ambientación y la inmersión de Red Dead 2, y no tanto debido a la enciclopedia que hay dentro del juego, en la que se da información sobre esos animales.
“Hemos encontrado que los videojuegos inmersivos, en los que se simulan ecosistemas de vida salvaje, son efectivos para enseñar a los jugadores a identificar especies en el mundo real”, concluye el estudio. Y se agrega que, en general, los videojuegos, ya sea como productos educativos o de entretenimiento, pueden ser una herramienta muy válida de aprendizaje.