viernes, noviembre 22, 2024
Tecnologia

¿Qué pasó con la red social Vine? Aquí te lo contamos todo

En 2013, el mundo empezó a experimentar las maravillas de la red social Vine: videos de seis segundos que podían ser fácilmente grabados y compartidos con otras personas. El servicio fue lanzado en 2013 y en sus inicios fue un misterio, aunque la popularidad pronto alcanzó grandes alturas, con casi 200 millones de usuarios activos para 2015. Sin embargo apenas dos años después, la función de descargar videos fue eliminada y para 2017, el servicio cerró por completo. ¿Por qué una plataforma social tan popular sufrió una muerte repentina? En definitiva: ¿qué pasó con la red social Vine?

¿Qué era Vine?

Lanzado en 2013 por los emprendedores — Dom Hofmann, Rus Yusupov, y Colin Kroll — Vine era un servicio de hospedaje de video, uno que permitía a los usuarios compartir video clips de seis segundos que reiniciaban al terminarse. Los usuarios podían navegar y descubrir «Vines», interesantes videos basados en temas, como comedia o música y visitar en una sección que mostraba «Vines» que en ése entonces eran tendencia.

Luego de ser lanzada, Vine fue más estrechamente comparada con Instagram. Sin embargo, en lugar de ofrecer la función de descargar fotografías, los usuarios podían descargar videos. Actualmente, Instagram permite descargar videos, pero cuando se lanzó Vine, Instagram no ofrecía esa función, dándole a Vine un segmento abierto del mercado al que iba dirigida.

Vine es recordada principalmente por los usuarios de internet gracias a la compilación de videos de YouTube que intenta compartir algunos de los «Vines» más divertidos de cuando la plataforma aún estaba activa. De esta manera, algunos de los más populares videos de Vine lo siguen siendo y sobreviven en la cultura popular.

¿qué le pasó a Vine?

La caída de Vine

Cuando Vine fue lanzada en 2013, Twitter ya había adquirido el servicio del trío original de emprendedores. Al paso de los años bajo la propiedad de Twitter, Vine enfrentó una dura competencia. Instagram rápidamente presentó Instagram Video, donde los usuarios podían descargar videos de 15 segundos. Para muchos, la introducción de videos de Instagram en su plataforma marcó el principio del fin para Vine.

Adicionalmente, ejecutivos y fundadores de Vine presuntamente estaban en contra de la idea de monetizar la plataforma; este factor, junto con los anunciantes admitiendo que deseaban crear un contenido mayor a seis segundos, se convirtió en un problema severo para la compañía. Se ha dicho que estos puntos han sido el motivo principal para la interrupción del servicio de Twitter. El 27 de octubre de 2016, Twitter anunció oficialmente que Vine estaría llegando a su fin.

Vine no murió inmediatamente y hubo algunos intentos para salvar la plataforma. El 16 de diciembre de 2016, se anunció que Vine continuaría como un servicio independiente, donde los usuarios podrían publicar videos en Twitter. Posteriormente, el 20 de enero de 2017, twitter lanzó un archivo de todos los videos de Vine; éste también fue descontinuado en 2019.

Competidores y sucesores

Durante su vida, Vine compitió directamente con Instagram. Desde ese periodo, Instagram ha expandido sus funciones de video, agregando videos más largos y habilitando una opción para una pantalla ancha. En diciembre de 2012 Snapchat también permitió que se compartieran videos de 10 segundos. TikTok también estaba arrancando cuando Vine cerró y actualmente sigue siendo una de las redes sociales más exitosas para compartir video clips cortos.

El sucesor oficial de Vine es un servicio conocido como Byte, creado por Dom Hofmann. Cuando estaba en desarrollo, Byte era conocido como V2; el servicio sigue activo en octubre de 2020 y te permite publicar videos de entre 2 y 6.5 segundos. Byte está disponible en todo el mundo en 41 idiomas, aunque todavía tiene que ganar la popularidad de su predecesor, Vine. Para quienes estén interesados en probar el servicio de video de Byte, está disponible para descargarse tanto en Android Play Store como en Apple App Store.

Recomendaciones del editor