Parlamento de Perú analizará moción de destitución presidencial
Lima, 1 nov (Prensa Latina) El Congreso de la República de Perú decidirá mañana si admite debatir una moción de vacancia (cese) del presidente Martín Vizcarra por acusaciones de cobro de sobornos cuando era gobernador de la sureña región de Piura. Chávez invocó a los legisladores a la mesura y la responsabilidad y reiteró el argumento gubernamental de que la vacancia del mandatario puede afectar la lucha contra la pandemia de Covid-19 y la recuperación de la crítica economía.
En el Parlamento se da por seguro que el pleno acepte la moción, para lo cual solo se necesitan 52 votos, y una vez concluido este paso, el presidente del Congreso, Manuel Merino, llamará a la sesión decisiva, que será entre el tercero y los tres días posteriores a la votación.
El potencial sucesor de Vizcarra, por ser el segundo en la jerarquía estatal, también citará al jefe de Estado, quien podrá hacer una breve alocución, y a su abogado, el cual fundamentará la defensa del mandatario.
El primer ministro, Walter Martos, dijo ayer que de admitirse el debate de la moción de vacancia, el Gobierno considerará acciones legales como una medida cautelar ante el Tribunal Constitucional para que paralice el proceso hasta que la corte falle sobre un pedido oficial de acotar la genérica causal de ‘incapacidad moral permanente’, invocada para la vacancia.
La solicitud se presentó en septiembre pasado, ante el primero y fracasado intento de destituir a Vizcarra, junto a una medida cautelar que el Tribunal Constitucional rechazó por considerar que no había riesgo inminente de destitución del mandatario.
Cabe señalar que la vacancia fue rechazada por amplia mayoría, pero esta vez el motivo es más grave del esgrimido entonces que argumentaba el involucramiento del Presidente en la contratación irregular de un cantante como consultor del Ministerio de Cultura.
De otro lado, Chávez fue consultado sobre susceptibilidades en torno a cambios militares decretados ayer por Vizcarra, quien ratificó por tercer año al jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, general César Astudillo, y reemplazó a los comandante generales del Ejército, la Fuerza Aérea y la Marina por jubilación.
El titular de Defensa dijo que se trata de relevos normales y ajustados a la ley y reiteró la posición del Gobierno, de que las Fuerzas Armadas no son deliberantes, es decir, no intervienen en política y cumplen estrictamente su misión constitucional.
npg/mrs
Prensa Latina
