Moscú: «Las graves violaciones de derechos humanos» de EE.UU. no le impiden «autoproclamarse como ‘referente mundial’ de las libertades fundamentales»

Publicado: 11 jul 2021 13:24 GMT

«Washington está buscando ‘violaciones’ en cualquier lugar, menos en su casa», sostiene la Cancillería rusa.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia publicó un informe sobre la situación de los derechos humanos en varios naciones, incluyendo, Estados Unidos. En su análisis, la institución asegura que «las graves violaciones de derechos humanos» no impiden al país norteamericano «autoproclamarse como ‘referente mundial’ de las libertades fundamentales».

«Los niveles del racismo, el antisemitismo, la islamofobia y otras expresiones de este tipo de discriminación, la xenofobia, la intolerancia relacionada con ello, siguen aumentando en Estados Unidos,» reza el documento, nombrando los numerosos casos de las violaciones de los derechos humanos en ese territorio, tras agregar que mientras tanto, Washington «está pendiente solo de la situación en otras partes del mundo».

La situación ha empeorado con la llegada de la pandemia, en la que los más afectados han sido «los inmigrantes y solicitantes de asilo»

Según el informe, en los últimos 30 años en EE.UU. se registró un aumento de desigualdades que «afecta la influencia política de los pobres, provoca la segregación geográfica de los ingresos e influye en el propio crecimiento económico». Asimismo, señala que la situación ha empeorado con la llegada de la pandemia, en la que los más afectados han sido «los inmigrantes y solicitantes de asilo».

Por otra parte, Moscú critica la doble moral de Washington al acusar a otros países del ataque a la libertad de expresión, cuando son ellos quienes bloquean la cuenta de Twitter del entonces presidente estadounidense, Donald Trump, y «otros materiales de los medios de comunicación cuya cobertura contradecía las preferencias políticas de las corporaciones mediáticas», entre otros ejemplos similares relacionados.

La Cancillería rusa afirma que Estados Unidos sigue violando «gravemente» los derechos humanos tanto dentro como fuera del país, «mediante medidas coercitivas unilaterales ilegales (sanciones)», cuyo ejemplo más alto es el embargo a Cuba (a pesar de las numerosas resoluciones de la Asamblea General de la ONU), que se mantiene desde finales de la década de los 50 y se ha convertido en el embargo más duradero de la historia moderna.

Entre otros detalles, el Ministerio de Exteriores manifestó también que no se pueden pasar por alto las violaciones en el ámbito humanitario en los territorios de los terceros Estados, donde «bajo el tradicional pretexto de la lucha contra el terrorismo», EE.UU. utilizó la fuerza militar, provocando víctimas entre la población civil.