Exdiputado independentista boricua destaca fracaso de anexionistas

En tal sentido explicó que quieren vender la idea de que el 52,0 por ciento de los electores puertorriqueños respaldaron la anexión a Estados Unidos en la consulta de ‘Estadidad Sí o No’.

Cuando la realidad -aclaró- es que se trató de la mitad de la gente que tiene derecho a votar y la favoreció.

Para García, se trata ‘como a una cuarta parte de los electores hábiles’ que concurrieron a las urnas el pasado 3 de noviembre, cuando el candidato del PNP a gobernador, Pedro R. Pierluisi, ganó con apenas 235 mil 334 sufragios, equivalentes al 32,0 por ciento.

El exparlamentario del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) planteó que entre los absurdos del PNP está ahora el proyecto de ley presentado para convocar unos comicios en 2021 a fin de escoger dos senadores y seis congresistas que vayan a Washington a nombre de Puerto Rico.

Allí se sentarán en la grama frente al Capitolio hasta que los remuevan, ya que pasará igual que con el Plan Tenesí o frenesí de doña Jenniffer González Colón, o la Comisión de la Igualdad, que describió como ‘papelones publicitados como engañabobos’, dirigidos a ‘hacer el ridículo en EE.UU’.

El exmiembro de la Cámara de Representantes anotó en el diario El Nuevo Día que el liderazgo del PNP llama ‘ideal’ a un operativo de lavado de cerebro, como si en la nación norteña no tuviesen transcrito ese libreto engañoso.

‘Ese es el libreto con un reclamo de supuesta igualdad, por la que esperan decenas de millones de afronorteamericanos y de chicanos cuyos tatarabuelos dejaron su pellejo y su sangre en un sistema económico hecho para enriquecer a una minoría exigua a fuerza de explotación, discriminación y vejaciones’, afirmó.

García recordó que los afronorteamericanos llevan más de tres siglos luchando, y son desde la Constitución misma de 1776, una minoría, primero esclavizada, y siempre excluida por la mayoría blanca.

A los mexicanos y a sus descendientes les viene sucediendo igual hace casi dos siglos, particularmente cuando fueron despojados de gran parte de sus tierras y les fue impuesta una ‘estadidad’ en Texas, y luego en otros territorios incorporados para de paso aumentar el número de los estados esclavistas, recordó.

En las Antillas, agregó, mucho antes de la invasión de Puerto Rico en 1898, primero Cuba y luego Santo Domingo fueron puestas en la lista con el mismo terrible y mezquino propósito: anexarlas y crear estados esclavistas.

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