La NASA ‘pinta’ los cielos del Polo Norte con ‘medusas gigantes’ para resolver un misterio (FOTOS)

Publicado: 11 dic 2021 07:56 GMT

El cohete de la misión expulsó «20 botes del tamaño de latas de refresco» a una altura de 630 kilómetros, creando así un impresionante efecto luminoso con forma de medusa.

A finales de noviembre, la NASA compartió una foto en Facebook que mostraba lo que parecían ser dos medusas gigantes flotando bajo un cielo salpicado de estrellas. En la descripción de la imagen, la agencia espacial estadounidense señaló que «suceden cosas extrañas en la atmósfera de la Tierra en latitudes elevadas».

Dos días después, la NASA publicó una nueva fotografía de otra de estas ‘medusas alienígenas’.

Según explicó la agencia, las luces multicolores aparecieron el 1 de diciembre sobre los mares de Noruega y Groenlandia, y fueron el resultado de la CREX-2, una misión de la NASA «para averiguar qué está sucediendo en esta región inusual de la atmósfera».

El cohete de la misión fue lanzado de madrugada desde el Centro Espacial Andøya (Noruega) y expulsó «20 botes del tamaño de latas de refresco» a una altura de 630 kilómetros, creando así un impresionante efecto luminoso con forma de medusa.

La NASA se refirió a su experimento como un ejemplo de investigación «con estilo» y señaló que los botes están programados para romperse a diferentes altitudes, de tal forma que cuando explotan liberan trazadores de vapor, «partículas que a menudo se encuentran en exhibiciones de fuegos artificiales que brillan al dispersar la luz solar o al exponerse al oxígeno». La forma que adquieren estas nubes brillantes revela, a su vez, cómo se mueve el aire en una sección determinada de la atmósfera.

Los científicos los lanzaron los botes hacia un área misteriosa conocida como cúspide polar, que describen como «una brecha en forma de embudo en el campo magnético de la Tierra que permite que los vientos solares accedan directamente a la atmósfera».

Esta zona llamó la atención de la NASA después de que los astrónomos se dieran cuenta de que los satélites y artefactos espaciales que la atravesaban tendían a desacelerarse, debido a que el aire es allí 1,5 veces más denso que en otros lugares a esa misma altitud. Sin embargo, los científicos de la NASA no saben a qué se debe este fenómeno.

«Cuando los vehículos espaciales viajan a través de esta región […] experimentan un ‘golpe de velocidad’ similar al del espacio debido a la mayor densidad del aire», puntualiza la NASA, agregando que «la misión CREX-2 espera averiguar qué fuerza invisible está soportando la masa extra dentro de la cúspide».

Según explicó la agencia, la misión ha sido diseñada «para medir los numerosos factores que podrían explicar cómo el aire denso de la cúspide permanece suspendido».

Entre las posibles explicaciones, los investigadores apuntan a la existencia de «efectos eléctricos y magnéticos en la ionosfera».