Canciller de Venezuela pide que se investigue «la protección y el aval» del Gobierno colombiano a la fallida ‘Operación Gedeón’

Caracas ha señalado reiteradamente a Iván Duque de estar detrás de los presuntos planes conspirativos contra el Gobierno venezolano.

El canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, solicitó este martes a las autoridades colombianas que investiguen «la protección y el aval» que presuntamente habría dado el presidente de Colombia, Iván Duque, a los organizadores de la frustrada Operación Gedeón, que se efectuó para intentar atentar contra el Gobierno del mandatario venezolano, Nicolás Maduro.

Las declaraciones de Arreaza se producen después de que la Fiscalía de Colombia confirmara que la operación militar, frustrada por las autoridades venezolanas en mayo de 2020, había sido planificada en Bogotá: «Venezuela lo denunció incluso durante la fase de planificación. Las autoridades colombianas nada hicieron», dijo el canciller a través de sus redes sociales.

Por ese motivo, el ministro de Exteriores de Venezuela instó a las autoridades colombianas a que «la próxima fase de la investigación» determine «la protección y el aval del gobierno de Iván Duque a estos actos violentos y establecer responsabilidades».

Según el diario El Tiempo, la Fiscalía colombiana informó sobre la imputación de tres ciudadanos venezolanos, vinculados a la Operación Gedeón, que firmaron un preacuerdo para pagar seis años de cárcel por admitir su responsabilidad en el entrenamiento de mercenarios con fines delictivos.

Los imputados son Juvenal Sequea Torres, Juven José Cepeda y Ryder Alexandre Russo Márquez. Las pesquisas del Ministerio Público determinaron que en los preparativos de la Operación se reclutaron unas 200 personas, que alcanzaron a ser trasladadas a Bogotá y Maicao para su entrenamiento, y para conocer de las operaciones armadas que realizarían en Venezuela.

La Fiscalía determinó que los cerebros del plan fueron Cliver Alcalá y el exdiputado venezolano Hernán Alemán, quien falleció en Bogotá el 7 de julio de 2020, tras padecer covid-19.

Núcleo en Bogotá

La Fiscalía de Colombia recalcó que la fallida operación se planeó en Bogotá, donde se conformaron grupos de 20 hombres, liderados por desertores del ejército y prófugos de la justicia venezolana, que fueron asesorados por agentes estadounidenses.

De acuerdo a las autoridades colombianas, los exboinas verdes Jordan Goudreau, Airan Berry y Luke Alexander Denmam se encargaban de capacitar a unos 200 hombres en tácticas de combate, con el propósito de incursionar en territorio venezolano y deponer al Gobierno de Maduro.

De resultar exitosa la operación militar, que incluía secuestrar o incluso asesinar al presidente Maduro y al entonces presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, pasarían a dejar en libertad a cerca de «300 detenidos» para asaltar el Palacio de Miraflores, en Caracas.

El plan, ejecutado el 3 de mayo de 2020, fracasó luego que las autoridades venezolanas detectaran la incursión marítima de los mercenarios en las costas de los estados La Guaira y Aragua, proceso en el que se dieron de baja a varios de los asaltantes.

El gobierno venezolano advirtió de la existencia del plan, al menos un mes antes que fuera ejecutado. De hecho, en marzo de 2020, el entonces ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, informó que se había descubierto toda una trama conspirativa para realizar asesinatos selectivos contra miembros y funcionarios del Estado venezolano.

Duque, por su parte, ha negado cualquier vinculación con la Operación Gedeón, al igual que Juan Guaidó, el exdiputado opositor que en 2019 se autoproclamó como presidente interino de Venezuela, y que ha sido señalado de contratar a los mercenarios estadounidenses que encabezaron la fallida incursión.