¿Es la Atari Jaguar la peor consola de la historia?
Literalmente creó la industria de los videojuegos modernos —con Pong en 1972— e invadió la sala de estar de millones de hogares en todo el mundo con el modelo 2600, lanzado en 1977.
Hablamos, obviamente, de Atari, la empresa dirigida por Nolan Bushnell y Ted Dabney que inauguró Silicon Valley y colocó al mundo de la tecnología a sus pies.
Hasta 1977 cuando Nolan Bushnell vendió Atari a Warner Bros por 28 millones de dólares.
Muchos dicen que desde ese mismo instante, la empresa comenzó una muerte lenta que fue decayendo en episodios trágicos como el fracaso de los juegos Atari basados en película ET, el extraterrestre en 1982.
Hasta llegar a la última consola creada por Atari, la Jaguar lanzada al mercado el 23 de noviembre de 1995.
Atari Jaguar fue creada por Martin Brennan y John Mathieson, ingenieros que impresionaron por su trabajo en la Konix Multisystem, un videojuego con cabina que nunca vio la luz.
Atari los convenció de que dejaran su empresa y los financió para que crear una nueva compañía llamada Flare II.
Inicialmente, desarrollaron dos consolas para Atari. Una con arquitectura de 32 bit con el nombre en código Phanter y otra con arquitectura de 64 bit llamada Jaguar.
Al ver que el diseño de la Jaguar iba más rápido que el de la Panther, Atari decidió dedicarse completamente a la Jaguar.
La consola prometía una gran revolución técnica ya que ofrecería gráficos en 3D en un momento en que los juegos en 2D eran la tónica.
Pero, lamentablemente, la Atari Jaguar decepcionó en todos los sentidos a los amantes de los videojuegos. De partida, a nivel de hardware, estaba muy por debajo de sus competidores. Eran los 90 y Atari ya no reinaba solo como a fines de los 70. Ahora tenía a Sega y Nintendo como los grandes protagonistas del mercado de las consolas.
Por otra parte, los usuarios se quejaban de que las piezas eran débiles y se estropeaban al poco uso.
Y para colmo de males, sus juegos —pese a ser buenos títulos como Alien vs Predator o Doom— no se veían al nivel de una consola de 64 bits, como prometía la publicidad de Atari.
Obviamente, el público reaccionó con frialdad y la Atari Jaguar fue el peor fracaso en ventas de la historia de las consolas de Atari. Tanto que algunos aseguran que no se comercializaron más de 20,000 unidades en todo el mundo. Por lo mismo, es una de las piezas más difíciles de encontrar hoy por hoy.
Para algunos la consola fue demasiado adelantada para su época, pero para otros es por lejos la peor consola jamás construida en la historia.