Los celulares más extraños jamás lanzados
A lo largo de los años, la industria de los celulares nos ha sorprendido con dispositivos que desafían toda expectativa en términos de forma, funcionalidad y estilo. Desde teléfonos con diseños fuera de lo común hasta aquellos con características inesperadas, exploramos los celulares más extraños que han sido lanzados al mercado a lo largo de la historia.
Motorola V70 (2002)
El Motorola V70 era único en su diseño rotativo, con un teclado retroiluminado en azul que le daba un toque distintivo. Ofrecía muchas funciones prácticas, como calendario, conversor de divisas, calculadora, marcación por voz, 64 tonos de llamada (con 32 personalizables), modo de vibración, SMS bidireccional, identificador de llamadas, llamadas en conferencia, tres juegos (Blackjack, Mindblaster y Paddleball), y acceso a internet inalámbrico. Aunque su diseño y funcionalidad parecen obsoletos ahora, el Motorola V70 fue una opción atractiva en su momento debido a su estilo y características avanzadas.
Nokia 7600 (2003)
En 2003, Nokia lanzó el Nokia 7600, un teléfono con una peculiar forma de gota destinado al público más joven, dos años después de presentar el modelo 5510. Al igual que la mayoría de los teléfonos básicos, el Nokia 7600 tenía una pantalla rectangular, sin embargo, a diferencia de la disposición convencional de las teclas, en el Nokia 7600 estas rodeaban la pantalla, lo que dificultaba su uso para escribir. A pesar de contar con capacidades avanzadas como la conexión a redes 3G y una cámara de 0,3 MP, su diseño extraño lo hacía prácticamente imposible de utilizar para realizar llamadas o enviar mensajes de texto.
Siemens Xelibri 6 (2003)
El año 2003 pareció ser el año de los teléfonos extravagantes, ya que Siemens también lanzó el peculiar Xelibri 6. Dirigido principalmente al público femenino, este celular adoptaba la forma de una concha con una bisagra en el medio, con un diseño inspirado en un polvo compacto. En su interior, el Xelibri 6 sorprendía con la inclusión de dos espejos, y uno de ellos tenía efecto de aumento y estaba rodeado por el teclado. Además, la pequeña pantalla se ubicaba dentro del espejo en la parte superior, ofreciendo una experiencia visual inusual.
Samsung Matrix / Samsung SPH-N270 (2003)
Lanzado en 2003, el teléfono Matrix fue diseñado para parecerse al dispositivo utilizado en The Matrix Reloaded. Contaba con un parlante con resorte que se levantaba para revelar la pantalla, y también incluía un receptor de GPS asistido, alarma, calendario, lista de tareas pendientes y una calculadora simple, aunque no ofrecía mensajes de texto (SMS). El equipo de diseño de The Matrix colaboró con Samsung para desarrollar un teléfono cuyas características y fecha de lanzamiento coincidieran con las de la película. Sin embargo, no estaba destinado para uso general; fue comercializado únicamente para los fanáticos de la película.
Haier P7 Pen Phone (2004)
El Haier P7, también conocido como el Pen Phone, tenía la forma de un bolígrafo bastante voluminoso. En uno de sus extremos tenía un parlante, mientras que en el otro extremo tenía dos orificios para el micrófono. En la parte superior se encontraba una pantalla pequeña y debajo de esta tenía los botones de flecha y un teclado apretado. Además, contaba con una cámara VGA y un puerto USB. Sin embargo, pesar de su capacidad para durar hasta seis días con una sola carga, su diseño peculiar hizo que no fuera popular entre los usuarios.
Motorola MPx (2004)
El Motorola MPx se destacó como uno de los teléfonos más innovadores de principios de los años 2000 gracias a su diseño único de doble bisagra. Esta característica permitía a los usuarios desplegarlo tanto verticalmente como un teléfono con tapa tradicional, u horizontalmente. Tenía una pantalla a color de 2.8 pulgadas y ejecutaba el sistema operativo Windows Mobile de Microsoft. Curiosamente, el teléfono móvil también venía con un lápiz óptico integrado. Aunque el teléfono estaba dirigido a profesionales, era demasiado complicado para su época. Al año siguiente, Motorola lanzó el Razr original, que sentó las bases para los plegables modernos tipo concha como el Galaxy Z Flip.
Samsung Serene (2005)
En 2005, Samsung lanzó un teléfono en colaboración con Bang & Olufsen, la marca de audio de alta gama. El teléfono tenía una bisagra de aluminio motorizada que se abría como una computadora portátil. Una mitad del teléfono tenía una pantalla, mientras que la otra tenía un teclado circular y una rueda de desplazamiento similar a la de un iPod. Aparte del diseño incómodo, el teléfono no tenía características esenciales como un reproductor de MP3, grabadora de video o conectividad 3G, todas las cuales eran bastante estándar en los teléfonos móviles en ese momento.
Nokia N93 (2006)
En una época en la que los teléfonos con cámara estaban ganando popularidad, el Nokia N93, sucesor del Nokia N90 (2005), presentaba un diseño giratorio que lo asemejaba a una cámara de video. Contaba con una cámara de 2MP que ofrecía hasta tres veces de zoom óptico, enfoque automático, flash y funciones de edición. La pantalla de 2.4 pulgadas se podía abrir tanto vertical como horizontalmente, además, tenía una pequeña pantalla LCD de cobertura que mostraba la hora, llamadas entrante y más. A pesar de todo, el diseño voluminoso del dispositivo lo hacía difícil de transportar.
Toshiba G450 (2008)
Uno de los celulares con el aspecto más extraño jamás fabricado fue el Toshiba G450, que tenía un diseño similar al de un control remoto con tres elementos circulares. La pantalla redonda estaba ubicada en la parte superior y debajo se encontraban dos teclados alfanuméricos, uno con los números del 1 al 6 apareciendo en el medio y otro del 7 al 9 en la parte inferior. Esto hacía que escribir en él fuera confuso y poco intuitivo. Por otro lado, el teléfono ofrecía MP3, USB y un módem HSDPA, pero carecía de funciones esenciales como Bluetooth.
Samsung Galaxy Beam (2012)
En 2012, Samsung decidió integrar un mini proyector en el cuerpo del Galaxy S2, dando vida al Samsung Galaxy Beam. Este proyector Pico nHD ofrecía una resolución de 640 x 360 píxeles y una luminosidad de 15 lúmenes, capaz de proyectar videos e imágenes de hasta 50 pulgadas a una distancia 1.83 metros, lo que era impresionante para un teléfono. Sin embargo, el Galaxy Beam no logró el éxito esperado debido a su hardware desactualizado y un software que ya tenía dos años de antigüedad, lo que afectó negativamente sus ventas.
LG Wing (2020)
El LG Wing presentaba dos pantallas, con la superior capaz de girarse, dejando la inferior en orientación vertical. Esto resultaba en un diseño similar a un martillo que ofrecía algunos casos de uso: ejecutar una aplicación en la pantalla horizontal y acceder a sus controles en la vertical, o bien, abrir una aplicación diferente en cada pantalla. Además, contaba con una cámara selfie emergente. Aunque el LG Wing fue elogiado por su avanzado software, fue uno de los últimos dispositivos lanzados por la división de teléfonos inteligentes de la empresa antes de cerrar debido a las bajas ventas.
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